19 jun 2022

Sociologías de la cárcel

El sociólogo Fdo. Álvarez Uría exponía, en un artículo en la revista Archipiélago (nº 3, 1989), un recorrido por las "sociologías de la cárcel". Algo que luego ampliaba en el libro Sociología de las instituciones (Morata, 2009), escrito con Julia Varela. Comenzaba con las propuestas de Beaumont y Tocqueville (1831), partidarios de desterrar los castigos físicos y reintegrar al preso, convertirlo en "un ser útil para la sociedad". La cárcel se presenta así como instrumento de defensa social y disuasión del delito. Más tarde, desde la perspectiva marxista o anarquista, la cárcel es analizada como uno de los instrumentos represivos del Estado, cuya función es perpetuar la posición de subordinación de las clases dominadas. 

El sociólogo E. Goffman, en su conocida obra Internados (1961) señalaba que las cárceles, lejos de ser instituciones de resocialización, son en realidad microsociedades cerradas y organizadas en torno a una autoridad omnímoda. Describía así unas sociedades democráticas plagadas de archipiélagos de instituciones totales.

En 1975, Michel Foucault publica Vigilar y castigar. Nacimiento de la prisión, donde mostraba a la cárcel y el manicomio como baluartes de defensa social nacidos en el predominio del Estado liberal, que, frente a los castigos físicos, promueve la vigilancia y el ordenamiento de las conductas. El Estado liberal busca gestionar los ilegalismos, muestra que el fracaso de la prisión (en su función de inserción social) permite la instrumentalización política de la delincuencia.

Por último, menciona el movimiento de abolición de la prisión,  un movimiento que busca reducir o eliminar las cárceles y el sistema penitenciario, y reemplazarlos con sistemas más humanos y eficaces.  Las estadísticas demuestran que las tasas de encarcelamiento afectan principalmente a los pobres y las minorías étnicas. Sumado a ello, generalmente no se rehabilita a los delincuentes si no que, en muchos casos, estos terminan en peores condiciones de las que tenían al momento de ingreso.  En este contexto se desarrolla también en ocasiones la denominada Criminología crítica.

 A lo anterior, habría que añadir el trabajo de Louis Wacquant (Las cárceles de la miseria, 2010). Según Wacquant, "el gueto y la prisión son, para todo propósito práctico, indistinguibles, reforzándose mutuamente para asegurar la exclusión de afroamericanos del resto de la sociedad, con auspicio gubernamental. Tal como Wacquant lo caracteriza: la prisión tendría que ser vista como un gueto judicial y el gueto como una prisión extrajudicial. Tomados en conjunto, ambos constituyen parte de un 'continuo carcelario'". Según Wacquant, las políticas neoliberales  de mercantilización del trabajo y desmantelamiento del Estado social están vinculadas con el refuerzo del Estado penal.

Para saber más:

 Iñaki Rivera Beiras, "Sociología de la cárcel". IUS ET VERITAS: Revista de la Asociación IUS ET VERITAS, Nº. 16, 1998, págs. 254-266

Cárceles de Piranesi. Piranesi, arquitecto de formación, aplicó sus conocimientos en distintos campos, representando sus obras a través del grabado. De este modo recreó edificios y objetos inspirados en la Antigüedad clásica, pero también prisiones, un tema que estaba de moda en las escenografías del s. XVIII.

Exposición El arte de Piranesi: arquitecto, grabador, anticuario, vedutista, diseñador (2010)


 

No hay comentarios:

La filosofía: "jugar en serio"

 Platón considera la actividad filosófica como "jugar en serio": tomar en serio cuestiones que generalmente ignoramos (o que consi...